Un lugar muy especial que celebra sus 525 años de españolidad
Hoy cumplimos 525 años de
historia como parte de España desde aquel 17 de septiembre de 1497 cuando Pedro
de Estopiñán, en una expedición iniciada por el Duque de Medina Sidonia,
incorporaba la Plaza a la Corona de Castilla.
Los cerca de 86.500 habitantes
que posee la ciudad nos encontramos orgullosos de nuestra Tierra.
Podemos presumir de muchas cosas.
Entre ellas, ser la segunda ciudad española con más elementos arquitectónicos de estilo modernista después de Barcelona o, entre otros, ser parte de España 18 años antes de que lo fuera el Reino de
Navarra, 162 años antes de que el Rosellón fuera francés, 279 años antes
de que se constituyeran los EEUU de América y tan solo 5 años después del
descubrimiento de América y la Conquista de Granada.
Además, poseemos una riqueza y un patrimonio sin igual. Somos ejemplo de convivencia multicultural y un punto estratégico que habitaron fenicios, griegos, romanos, árabes y vikingos (sí, vikingos también, indagad un poco y veréis)
Hoy en día la ciudad dispone de
un clima agradable con muchas horas de sol al año lo que la convierte en un
interesante destino turístico. Así mismo, posee una gastronomía muy variada
influenciada por las culturas predominantes (cristiana, musulmana,
judía e hindú). También, para los mas aventureros, es la puerta de entrada a
África.
Mi Ciudad
Joya del Mediterráneo, Reina de África,
pequeña y bonita, princesa del mar,
trozo de Europa y de España,
alegría, corazón y fuerza vital.
Por ti pasaron fenicios y vikingos,
romanos, árabes, vándalos y púnicos,
pero ahora eres mía, mi hermosa doncella,
la que me alegra la vista cuando te miro de cerca.
Tu arquitectura, tu sociedad y aroma
te hacen única, te hacen ser para mí una persona
muy especial y acogedora, una maravilla,
un sol y por eso te quiero, Melilla.
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