Castillos

Probablemente de pequeños siempre nos ha fascinado el típico castillo medieval de las películas. Majestuoso y señorial se erguía frente a nuestros ojos a través de la gran pantalla transmitiéndonos códigos de honor, fortaleza y grandiosidad. Soñábamos con vernos engalanados con los ropajes de los personajes de aquella época, subidos a un caballo vestido con relucientes armaduras, armados con una gran espada o lanza. Nuestro enemigo… el dragón. Nuestro objetivo…la doncella. Cuando nos hacemos mayores recordamos ese quimérico sueño infantil con la vista puesta en aquellos vestigios de la historia que aun perduran y resisten al paso del tiempo. Aquellos que nos hacían soñar cuando éramos niños y los que aún nos hacen divagar con historias de leyenda y cuentos de ensueño. Por eso, hoy en día, siempre que puedo, cuando alguno se cruza en mi ruta, intento no desaprovechar la oportunidad de, al menos, acercarme y verlo de cerca. No siempre se encuentra abierto al...